El titulo más usual seria “EL TRANSITO EN GOYA: UN CAOS” pero no creo que debamos dramatizar tanto solo para decir unas cuantas verdades que, a veces, nos duele reconocer. También es posible que el lector inmediatamente relacione esta columna con un desproporcional ataque a la Dirección de Tránsito. No lo es.
Empezaremos por lo que debería ser el final de esta columna. Tránsito es una repartición conformada por un grupo de gente que, con errores y aciertos, cumple una función. Lo que efectivamente no representa es a un ejército de soldados o a un escuadrón de policías que haga imponer las leyes con un rigor casi demencial. Y efectivamente no lo es. A diario podemos ver el deambular de inspectores peatones, en motos y en camionetas circular, controlar y, porque no, hacer cientos de infracciones. Pero no es un ejército. La pregunta es radical: ¿si hay miles de infracciones no será porque alguien las comete? Allí vamos.
El goyano es demasiado complicado a la hora de transitar por sus calles, sean peatones, ciclistas, motociclistas o conductores de vehículos. Empecemos resumiendo: NADIE CUMPLE NADA, o lo que es peor aún: TODOS QUIEREN QUE EL OTRO CUMPLA PERO NO ÉL.
Veamos algunos ejemplos: los peatones –siempre quejosos- cruzan las calles por cualquier parte. Se mete a veces con una familia entera entre los vehículos que pasan para tratar de llegar a la otra orilla, y si por un milagrazo van hasta la esquina, esperan en el medio de la calle (entiéndase en la calzada) para cruzar impidiendo el paso de los que quieren doblar.
En las esquinas hay una forma de cruzar cuando hay semáforos y la senda pintada lo indica. No es “de cualquier esquina a cualquier esquina” (¿ya se dieron cuenta?). El peatón tampoco respeta los semáforos, muchas veces “se manda” cuando no le corresponde cruzar.
Las motos y bicicletas, muchas veces protestan contra los vehículos pero ellos tampoco cumplen. Una señal de giro de un vehículo es ignorada directamente y el ciclista o motociclista pasará como si nada. Muchos de ellos pasan los semáforos en rojo sin atenuantes y otros conducen a velocidades sin límites.
Los conductores de vehículos –y sumamos a los motociclistas- no quieren caminar ni media cuadra. Quieren que sus móviles les lleve hasta la puerta de donde van. No importa si allí es estacionamiento de discapacitados, rampla, entrada de vehículos o estacionamiento de motos. Se para en doble fila y bajará a hacer su trámite, en ese momento casi con seguridad pasará la camioneta de tránsito y le hará sonar la sirena.
Es absolutamente común ver a conductores de cualquiera de esos móviles hablando por celular, o lo que es más increíble, escribiendo mensajes de texto o visitando Facebook. Como yo que con absoluta justicia me hicieron una multa por llevar auriculares y querer poner música.
Y si todavía no se quedan sorprendidos con el relato, habrá que agregar que “más increíblemente”, ya no solo los automovilistas toman mate sino los motociclistas, que de a dos o tres van tomando mate mientras conducen. Increíble pero real. Solo se ve en Goya.
Olvidemos algunas cosas mucho más simples como usar casco o poner la moto en el estacionamiento. No será así. Será casi siempre: sin casco y la moto arriba de la vereda.
Es complicado el goyano, tanto conduciendo como crítico de la conducción del resto.
Lo que sería un buen aporte municipal es que hagan coordinar los semáforos. No es posible que tardes más en Goya desde la Rotonda a la Rolón que en Corrientes desde la Rotonda al Puente. Si acaso lo hicieron a propósito para detener al conductor, están equivocados. Los ciclistas, motociclistas y muchas veces autos lo pasan en rojo para no hacer una “estúpida” espera con el consiguiente peligro que lleva.
Por último, el tan trillado tema de la documentación. También increíblemente muchos creen que comprar y pagar “con el fruto de su esfuerzo” un vehículo, ya le habilita a conducir y gritan a los cuatro vientos cuando le secuestran ese vehículo por falta de documentación. Vean, días atrás me chocó en el paragolpes trasero una moto. Huyeron, luego se supo (porque me lo confesó) QUE NO TENÍA, CARNET, NUNCA DOCUMENTO LA MOTO, NUNCA PAGÓ UNA PATENTE Y LO MAS INCREÍBLE: NO TIENE D.N.I!!!!!!! ¿A quién le reclamas? Lógicamente: sin seguro. Te queda iniciar un juicio de cinco años para saber si el juez te da la razón y si así sucede, tampoco cobrarás nada por ser insolvente…PERO…EN GOYA TODO EL MUNDO SE QUEJA PORQUE SE LE SECUESTRA EL VEHÍCULO. EN CUALQUIER LUGAR DEL MUNDO SERÍA ASÍ, Y MUY PROBABLEMENTE QUEDE DETENIDO EL CONDUCTOR PUES PUEDE SER ROBADO EL VEHÍCULO.
El tránsito en Goya es complicado porque principalmente “la gente lo complica” y pretende que el control subsane todas sus indisciplinas. Cualquiera de esas infracciones que marcamos, en cualquier otra ciudad sería sancionado inmediatamente, te llevaría la grúa tu vehículo, o de última te comerías una p... de un taxista e inclusive de un ciudadano común.