Desde la cúpula provincial de Peronismo en Marcha, Zaida Escalada ha manifestado el imparable ímpetu con el cual la militancia de Unión por la Patria está desplegándose por cada rincón del territorio, casa por casa, persona por persona. Este movimiento lleva consigo la fe, la esperanza y la firme convicción de que, a partir del 10 de diciembre, Sergio Massa y Agustín Rossi dirigirán el rumbo del país. Su objetivo principal: gestar las transformaciones necesarias, velando especialmente por la protección y sostenimiento de los derechos ya conquistados.
La líder política no ha escatimado en anuncios, adelantando que en todas las localidades se han preparado festividades para la noche del domingo venidero. Además, ha hecho referencia a los resultados de diversas encuestas de agencias nacionales e internacionales, las cuales esta semana han posicionado a Sergio Massa con una ventaja considerable frente al otro candidato. Asimismo, ha subrayado la notable desmoralización de los simpatizantes libertarios, evidenciando una marcada inclinación del pueblo a favor de la sensatez, la empatía, y la solidaridad, y en rechazo a la violencia, el odio y el resentimiento.
A pesar de que a nivel nacional se habla de una diferencia de 5 o 6 puntos, las afirmaciones aseguran que en localidades como Goya, en el corazón del interior correntino, Massa alcanzaría una ventaja de hasta 20 puntos sobre su contrincante.
No obstante, surge un dato aparte que agrega un matiz significativo a este complejo entramado político: numerosos militantes relatan que varios referentes y dirigentes de ECO+Vamos Corrientes han manifestado su apoyo a Massa en esta campaña, en franca contradicción con las directrices del Gobernador Gustavo Valdés. Este último, preocupado por la fuerza ascendente del peronismo correntino, teme por la continuidad de su espacio político hacia el 2025.
Con estos movimientos y contramovimientos, se perfilan días de gran expectación y definiciones políticas trascendentales en la provincia de Corrientes.